sábado, 22 de octubre de 2011

Atrapada

¿Idígoras?... Idígoras... ¿me oyes?...
No sé si aún puedo contactar contigo. No sé si aún estás aquí. Ni siquiera sé el tiempo que ha pasado.
Apenas podría explicarte lo que he hecho o dónde he estado. Me parece que he olvidado hasta quién soy y qué hago aquí. Pero te recuerdo a ti. ¿Sigues ahí? ¿Puedes ayudarme?
Intentaba contactar con Él y... de repente... la nada. He intentado salir, escaparme... siempre sin éxito. Algo invisible me tenía atrapada. Después, sin aviso... simplemente desapareció y... yo me quede aquí... sin saber muy bien por qué.
Espero saber algo de ti pronto... algo que pueda ayudarme a recordar.
Ayúdame,
Almaw

jueves, 25 de noviembre de 2010

Estancamiento.

Idígoras,

esto es de locos. No tengo tiempo. Los días los hago durar 26 horas… y ni con esas. Ahora está empezando a pasar algo muy raro. Pequeños humanos menores de un metro me asaltan por la calle. Trepan por mi cuerpo. Y luego, por usar nuestro propio idioma, se escolingan de vuelta al suelo. Es diferente. Es cansado. Y a la vez me deja llena de alegría y de ganas de hacer más cosas. Qué raro, ¿verdad?

Yo también te echo mucho de menos, pero si el día 20 fue poco, no pasa nada. Apenas queda una semana para la primera fase de nuestro plan. Tengo muchas ganas, pero… ¡siento que no estoy preparada!

No puedo contarte muchas novedades la verdad. No he contactado con nadie. No he avanzado demasiado con mis habilidades. No he hecho ninguna averiguación, ni teorías, ni siquiera hipótesis. Lo único nuevo que he notado es que mis precogniciones aparecen absolutamente siempre que yo quiero, pero siguen poblando mis sueños. Y no sé si eso es normal, son demasiado vívidos, me asustan.

Por cierto, ¿has contactado con Asj? No sé nada nuevo de esa conciencia. Y estoy… ansiosa. Creo que esa es la palabra. Me da buena sensación. No te sientas reticente,… me gusta.

Él tampoco me ha buscado durante esta semana. Creo que sabe que ni siquiera tengo nada interesante que contarle. Me gustaría tanto verle…

De hecho… creo que lo intentaré ahora. Quiero hablar con él. Quiero preguntarle por qué me he estancado. Lo prepararé todo… sí…

Prometo escribirte pronto con lo que saque en claro, se me está ocurriendo algo que preguntarle… (ahora una sonrisa de las que nunca traen nada bueno escapa de mis labios, nos acordaremos en tiempos venideros de este momento).

Con cariño,

Almaw Onthebridge

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Dormir bien.

Idígoras,

empieza por poner la canción. Lee mientras la escuchas, y luego duerme tranquilo. No me gusta que la gente a mi alrededor tenga problemas para dormir. Dormir es la forma más bella de descansar...


Ahora sí, vamos allá.

¡No vas a creer lo que me ha sucedido! Ayer, mientras estaba tranquila, una conciencia desconocida intentó contactar con la mía. Puedes imaginar el susto que me llevé. Tras un momento pensando en cerrar mi mente al final me dejé llevar. Conecté con esa mente anónima y… ¡era alguien que se hacía llamar Asj! ¿Qué te parece? No puede ser coincidencia, ¿verdad? Fue algo rápido y unilateral.

Querida Almaw y querido Idígoras,

anoche fue una de esas noches como las que soléis tener vosotros. Yo no hablo con seres extraños y cosas así, pero sí pienso y dentro de mí había algo que no me dejaba dormir. Como siempre en esas noches, pienso en la gente a la que quiero. Y sin saber cómo acabé dando vuestra correspondencia, que ya llevaba unos días rondando por ahí. Y pensé: “es un buen momento para ello”. Me acomodé en la cama, intente levitar como hace Idígoras, y comencé a leer. Sobre todo lo que pensé mientras las leía,... no quiero hablaros ahora, eso se queda para otra carta. Pero quería principalmente deciros a ambos, que esta nueva misión me fascinó, me encantó, ¡me ilusionó! Ya sólo me queda animaros. Continuad con el plan y, por favor, nunca dejéis de escribiros cartas como esas.

También dijo que encontraría la manera de contactar contigo… ese diario tiene algo que ver. Es impresionante el dominio que tiene, ¿cómo fue capaz de hacer materializar ese diario fuera de tu viaje? ¿Cómo pudo encontrarme aún con mis medidas de seguridad? Ahora ya no estoy asustada, pero sí asombrada del poder que Asj guarda en su interior. No sé cómo, pero de alguna manera estoy segura de que también tiene problemas con él, igual que nosotros también necesita aprender a manejarlos y controlarlos, aprender que en su interior hay algo grande. Porque es verdad Idígoras, hay algo grande en nuestro interior aunque a veces se nos olvide. Tengo la certeza de que, cuanto más precisos sean nuestras habilidades, más convencidos estaremos de que somos grandes, de que somos dioses como tú dijiste al principio del proyecto.

No he contactado con Él desde hace unos días. Lo intentaré de nuevo probablemente durante esta noche. Pero no creo que le pregunte por el diario. Prefiero esperar después de las últimas novedades, ¿no crees?

Por cierto, ¿y los enlaces? Me gustaría tener algún avance el día 20. Pero no te presiono, sé que es algo que tienes que hacer con mucho cuidado. Confío en ti.

En cuanto a mis habilidades, no tengo novedad de la que informarte. Son más fuertes y prácticamente los uso a mi antojo. He logrado que los objetos vengan a mí desde unos dos pies de distancia… y ahora se mantienen firmes en mi mano. Me pregunto cuánta longitud será capaz de hacerlos mover mi mente. Sigo en ello.

Y, por lo que veo, tus poderes también se van desarrollando. Estoy tan feliz por ello. Sé que seremos grandes.

Recuérdalo, somos dioses…

Con cariño,

Almaw Onthebridge

domingo, 14 de noviembre de 2010

Incertidumbre.

Querido Idígoras,

Pensarás que quería desentenderme de ti y del plan. Nada más lejos de la realidad. Esta semana ha sido de locos. Nada de lo que hice funcionó. E intenté buscar información sobre tu último viaje… y tampoco sé si fue de utilidad lo que encontré.

Entré en el gran mar de pensamientos en el que puedo sumergirme e hice un sondeo rápido sobre los tótems. Pero no capté nada particularmente interesante sobre alguno de siete cabezas. Ahora sé que los tótems fueron adorados en los continentes de América del Norte y de Oceanía. Así que tu viaje debió de ser allí… Lo que sí encontré fue algo que no me gustó nada sobre el número siete. Es demasiado recurrente. No creo que sea una casualidad, tienes razón. Siete serán nuestros poderes. Al principio descubrí que siente eran los colores del arco iris. Y me gustó, sabes que me gustan la luz y los colores. Pero después,… siete son también los pecados capitales. Y eso ya no me gusta tanto. Averígualo y comprueba tus hipótesis sin ponerte en peligro, ¿de acuerdo?

Respecto a tu nueva habilidad, suena peligroso. Debes aprender a controlarla bien. También suena muy útil, quizás tenga que contratar tus servicios…

Yo me siento muy inútil estos días. Todo se me rompe o se me cae de las manos. Es como si las cosas odien que las toque. Qué estúpido, ¿verdad? Cuando acerco mi mano a algo, el objeto viene hacia mí en el último segundo antes de agarrarlo. Y se queda ahí, temblando… No sé qué me pasa. Intentaré trabajarlo durante esta semana próxima si puedo. Así el día 20 podré mostrarte resultados si es que los hay.

He de contarte algo más. Volví a contactar con Él. Ya sé que no tenía necesidad, pero… me apetecía… lo extraño tanto… Estuvimos conectados bastante tiempo. Le pregunté por sus movimientos, y Él por los míos. Nos pedimos perdón, y prometió ayudarnos. Eso sí, a su manera, ya sabes, siempre tan críptico…

En mi próxima carta prometo ponerte al día con lo relacionado a mi inminente visita. Solo queda una semana. Sin embargo, aun no sé nada de Ermia. Pero ya conectaré contigo por una vía segura e inmediata. Hemos de hablar de ello.

Con cariño,

Almaw Onthebridge

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Conexión.

Querido Idígoras,

lamento mucho haber tardado tanto en dar respuesta a tu última carta. Pero la espera ha merecido la pena. Quería tener noticias antes de escribirte, sabes que odio las palabras vacías de significado.

¡He contactado con él! En los primeros intentos no tuve éxito, pero finalmente… Creo que fue la décimo novena vez que intenté encontrar su señal, su mente en el inmenso mar de redes en el que me encuentro cuando hago estas cosas, cuando sentí débilmente su presencia. Me enganché a ese fino hilo y por fin establecí contacto con Él. Nos ha estando evitando todo este tiempo, tenías razón. Sus pensamientos sonaban llenos de rencor, pero no ha podido disimular los sentimientos que le despertamos. Logré que me respondiera a algunas preguntas. Y lo que es mejor, ahora mi recuerdo de su conciencia es firme, podré localizarlo con más facilidad la próxima vez.

A ver… te informo. ¡Siéntate! Tienes que ir acostumbrándote a tus viajes mentales, y no tan mentales. Él dice que es normal. Que te seguirá pasando. Y que no hay nada que hacer para evitar que desarrolles de manera irregular tus artes. Los viajes astrales y la levitación irán haciéndose más fuertes en ti poco a poco. Sin normas, sin motivos y sin ayuda. Además dice que no serán los únicos. Sabremos que nuestro descubrimiento interior ha terminado cuando tengamos siete nuevas habilidades. Estoy nerviosa porque no quiere decirme cuáles serán.

¡Ah!, sí que me dio una recomendación para ti. Más bien una advertencia. Cuidado con los momentos en los que eres capaz de separar tu alma de tu cuerpo. Si la distancia es muy grande, o el espacio de tiempo muy dilatado, es posible que la psique no encuentre el camino de vuelta. Y entonces estarás en un problema. Tu aliento vital vagará sin rumbo hasta apagarse. Sin más. Prométeme que tendrás mucho cuidado.

También le pedí consejo sobre nuestra… nuestro… sobre el plan. Me dijo que no nos implicáramos. Que buscáramos enlaces. Ellos no están preparados aún para encontrar pruebas fidedignas de nuestra existencia. Creo que eso puede ser tu trabajo. Aquí todo el mundo se conoce, todo se notaría tanto… Busca dos humanos, pero se consciente de lo que van a tener que hacer. No hagas que sufra más gente de la necesaria.

Por mi parte no hay nada nuevo, las visiones siguen conmigo. Son cosas cotidianas, pero cada vez más nítidas. Creo que estoy aprendiendo a provocarlas. Dice que lo haré. Últimamente me está ocurriendo algo aún más extraño, pero también muy interesante. He desarrollado una asombrosa capacidad de persuasión. A veces me asusta, creo que soy capaz de anular las propias intenciones de las personas.

Me he estado cuestionando cosas sobre estos poderes. ¿Podremos, de alguna manera, compartirlos? ¿Seré capaz de hacerte ver mis precogniciones? ¿Podría levitar solo agarrándome a ti? Tengo tantas ganas de verte…

Lo comprobaremos el día 20. Queda poco.

Un abrazo,

Almaw Onthebridge

martes, 2 de noviembre de 2010

Presentimientos. Corazonadas. Visiones.

Idígoras,

¡¿Otra vez!? Sabes que no me gusta que salgas por la noche desprevenido. Te tengo dicho que te mantengas oculto, que no se fijen en ti. Ten cuidado con esos seres que puedes encontrarte… nunca sabes cómo reaccionarán ni dónde te quieren tener.

Me alegro de que finalmente nada extraño haya ocurrido, pero no puedo negarte que también me alegro de que hayas tenido miedo, pues espero que así seas más cauto y elijas con minuciosidad las fechas en las que decides hacer tus incursiones nocturnas en su mundo.

En cualquier caso, infórmame ¿has descubierto algún posible primer objetivo? Aún no estoy segura de que todo salga bien. ¿El día 20 no es muy pronto? Tengo ganas de ver la información sobre la mesa, eso aclarará las cosas, ¿verdad?

Idígoras… dices en tu carta que crees poder sacar tu mente fuera de tu cuerpo. He de confesarte algo. En los últimos días estoy notando extrañas sensaciones. Curiosos sueños que se cumplen. Presentimientos. Corazonadas. Visiones. Todo esto me asusta, me da miedo, no sé lo que es. ¿Crees que es normal? He pensando en consultarle, ¿qué opinas? ¿Querrá saber algo de nosotros? Hace tanto que nos ponemos en contacto con él…

Escríbeme, dime qué piensas.

¡Ah!, Ermia y Pautch… hace un tiempo que no sé de ellos. Me preocupan. Me preocupa Ermia. A veces creo que deberíamos hacerle partícipe de nuestro plan. Otras me inclino más a pensar que si Pautch se entera nada saldrá bien.

Estoy muy confusa al igual que tú, pero sigo optimista.

Espero con ganas que llegue el día 20.

Hasta entonces, mantenme informada.

Con cariño,

Almaw Onthebridge

sábado, 30 de octubre de 2010

Deja que la lluvia te limpie

Amigo Idigoras…

No sabes cuánto me reconforta leer tus cartas, sobre todo sabiendo lo difícil que es juntar los segundos para escribirlas.

La vida en la ciudad es rápida, violenta y llena de humo. Y sus paraguas podrán lastimarte sin remordimientos. Sin embargo siguen sin saber a quién atacan, no lo saben ellos ni sus dueños. Y eso también es bueno. Recuérdalo.

Si por el contrario vives perdida en medio de la nada, todo es distinto. Nunca recibes un ataque anónimo. Todos van firmados. Así que cuando llegan ya no puedes echar las culpas al azar.

Mi semana también ha sido fructífera para pensar, aunque no siempre me acuerdo de lo que he pensado. Es como soñar. Pero algunas veces, las mejores, se me queda una pequeña idea, que me vuelve a guiar al tema original.

¿Y sabes qué? También estuvo lloviendo aquí. Dejé todo atrás y anduve unos minutos hasta llegar a un montón de hojas secas. ¡Como cuando tenía diez años! Luego, sentada encima de las hojas dejé que las gotas de lluvia fueran limpiando todo lo sucio y todo lo malo que me rondaba. Por eso ahora soy optimista, la lluvia se ha llevado toda la niebla que no me dejaba ver lo que iba a pasar. Y ya lo veo, ya lo sé. Vamos a llegar más allá de lo que puedas pensar.

Ahora ya lo sabes. Sal de tu guarida. Machaca todos los paraguas. Deja que la lluvia te aclare el camino. Y cuando lo veas, me escribes.

Te quiere,

Almaw Onthebridge